Estaba en un restaurante y mientras iba al baño, vi como otra persona tomaba el mismo camino que yo. Al entrar al baño, observé cómo ocupaba uno de los dos
cubículos, que eran de esos que no llegan hasta el techo. Yo, lógicamente, entré en el
otro. De repente, oigo que me dicen:
- ¡Hola!
Yo seguí callado, pero el tipo vuelve a decir:
- ¡Hola!. ¿Me escuchas?
Yo, para no parecer mal educado, contesté:
- ¡Hola!
Y el tipo pregunta:
- ¿Cómo estás?
A lo que contesté:
- Bien, gracias, un poco cansado.
Y el tipo dice:
- ¿Qué haces?
Yo ya estaba intrigado, pensé, siempre hay gente muy rara en este mundo, y contesté:
- ¿Y qué voy a estar haciendo?. Lo mismo que tú, ¡Cagando!
Inmediatamente oigo:
- ¡Mi vida, te llamo después porque tengo a un imbécil al lado, que está contestando a todas mis preguntas!cagar la bola de billar, ahora antes de comer cualquier cosa primero la mide.